Según esta organización, en 2022, 200 millones de trabajadores migrantes enviaron 647.000 millones de dólares a más de 800 millones de familias en países de renta media y baja, con entre 10 y 12 pequeñas transferencias al año de unos 200 dólares de media.
Cada día llegan cerca de 1.800 millones de dólares y, la mitad de esa cantidad, unos 900 millones de dólares, “está impulsando el desarrollo rural y agrícola”, dijo hoy el presidente del FIDA, Alvaro Lario, en la apertura en Nairobi del Foro Global Sobre Remesas, Inversión y Desarrollo.
“Tenemos que cambiar nuestra percepción y reconocer a los trabajadores migrantes y a los inversores de la diáspora como contribuyentes esenciales para el desarrollo”, señaló.
El foro, organizado por el FIDA, la Oficina del Asesor Especial para África (OAEA) de las Naciones Unidas y el Grupo del Banco Mundial (GBM), reúne entre hoy y el viernes a expertos e instituciones de todo el mundo en la capital keniana para abordar las oportunidades de negocio y desarrollo socioeconómico derivadas de las remesas.
“En estos países, el valor combinado de la Ayuda Oficial para el Desarrollo (AOD) y las inversiones extranjeras directas es sustancialmente menor que los fondos enviados por los migrantes a sus seres queridos”, señaló el FIDA en un comunicado.
Ese dinero, a pesar de las crisis mundiales provocadas por la covid-19 o la guerra de Ucrania, “sigue siendo una fuente segura de ingresos” para las familias.
Asimismo, el organismo estima que los receptores logran ahorrar o reinvertir un 25 % del dinero que reciben y un cuarto de esos ahorros (unos 25.000 millones de dólares anuales) acaba en inversiones relacionadas con la agricultura.
El continente africano, que recibe cada año más de 100.000 millones de dólares en remesas, se mantiene, sin embargo, como la región con las tasas más altas para el envío de dinero, con un coste medio el pasado año de un 8,85 % en transferencias de 200 dólares.
A través de la financiación de proyectos para mejorar el acceso a productos financieros “básicos” -como el ahorro, el crédito o los seguros- el FIDA “sigue trabajando para conectar los fondos recibidos con un amplio abanico de oportunidades de finanzas rurales”, dijo la organización. EFE
Fuente: Swissinfo