En el tejido complejo de las migraciones contemporáneas un fenómeno que emerge con contundencia es la feminización de estos movimientos.
Autora:Cristina Arcas Noguera
¿Qué significa realmente la feminización de las migraciones?
Es más que una mera estadística; es un caleidoscopio de historias individuales, un tapiz de desafíos y triunfos que merecen ser explorados. En esta nueva era migratoria, la «feminización» se desdobla en dos dimensiones cruciales. Por un lado, presenciamos un aumento cuantitativo de mujeres inmersas en los flujos migratorios, pero más allá de las cifras, se revela un cambio cualitativo en el papel que desempeñan. No se trata solo de una cuestión numérica, sino de un cambio paradigmático: las mujeres migrantes no solo son participantes, sino pioneras del movimiento. Son el primer eslabón de la cadena migratoria. Son fuerza motriz social, económica y política en las sociedades de origen y destino, desafiando las narrativas previas.
En este contexto, nos sumergimos en un análisis más profundo, explorando las intersecciones de ser mujer y ser migrante, los desafíos y los triunfos. ¿Cómo influye esta transformación en la vida de las mujeres que se aventuran hacia nuevos horizontes? ¿Qué contribuciones significativas ofrecen a las sociedades que las acogen y a las que dejan atrás? A través de este viaje de reflexión, buscamos desentrañar las capas de una realidad compleja y ofrecer una nueva visión de la feminización de las migraciones en el siglo XXI.
Datos y perspectivas: la feminización de las migraciones a nivel global y en España
A nivel mundial, existe un consenso respecto a la conexión intrínseca entre la movilidad forzada y el género, abarcando una multiplicidad de aspectos. El género[1] es un factor significativo que influye en todos los aspectos de la movilidad humana: desde la toma de la decisión de emigrar hasta el asentamiento en el país de destino, atravesando el tránsito por las fronteras o la elección de regresar al hogar. Los roles, expectativas, relaciones y dinámicas de poder asociadas al género impactan de manera sustancial en todos los aspectos de la migración, desde las oportunidades para emigrar hasta la integración en el mercado laboral, las experiencias, la exposición a la violencia y la explotación, así como el acceso a derechos y servicios.
A pesar de la reconocida escasez de información y datos sobre la migración de mujeres y niñas, las últimas décadas han revelado cambios en los patrones migratorios1:
- La migración femenina experimenta un crecimiento más acelerado que la masculina.
- Cada vez más mujeres viajan de manera independiente, solas.
- Surge una nueva y sexualizada división internacional del trabajo, con una creciente demanda de mujeres migrantes en sectores tradicionalmente mal remunerados, en la informalidad, siendo figuras clave en la cadena global de cuidados
Entre desafíos y resistencias: la realidad de las mujeres migrantes
Las voces diversas de las mujeres tejen una narrativa que pone de manifiesto una multitud de vulnerabilidades, abusos, luchas y obstáculos que marcan el inicio de una experiencia migratoria afectada desde su origen por los rígidos roles de género tradicionales. Desde los países de origen hasta las travesías y los destinos, las mujeres migrantes enfrentan un mayor riesgo de discriminación, explotación y violencia.
Para comprender la complejidad de la movilidad humana, resulta esencial otorgar una posición central a la perspectiva de género en los análisis sobre las causas y consecuencias de la migración. Este enfoque permite desentrañar las dificultades que rodean a las mujeres migrantes, destacando las desigualdades estructurales y desafiando los estereotipos arraigados. Al poner el foco en las experiencias específicas de las mujeres en el contexto migratorio, podemos arrojar luz sobre las áreas críticas que requieren atención y acción para garantizar la igualdad, la justicia y la dignidad en todos los aspectos de la migración.
Estas experiencias deben inspirarnos a la hora de redoblar el esfuerzo colectivo que debería permitirnos erradicar para siempre estas prácticas sistémicas de violencia y las condiciones que las favorecen. Muchas de estas prácticas conllevan el sometimiento y la privación de la libertad de las mujeres, situándolas en un contexto de exposición a formas modernas de esclavitud.
Empoderamiento y resiliencia: narrativas positivas de las mujeres migrantes
A pesar de los desafíos evidentes, es crucial reconocer y celebrar las historias de empoderamiento y resiliencia que caracterizan la experiencia de las mujeres migrantes. En su travesía, muchas de ellas se erigen como agentes de cambio, desafiando estereotipos y superando obstáculos. La migración no solo representa una búsqueda de oportunidades económicas, sino también un camino hacia la autorrealización y el crecimiento personal.
Desde emprendimientos exitosos hasta liderazgo comunitario, estas mujeres no solo enfrentan los retos, sino que también generan impactos positivos que se reflejan en las sociedades que las acogen. Su contribución al tejido social, económico y cultural es incalculable.
Por ello es necesario comenzar a cambiar la narrativa hacia estas experiencias fortalecedoras, no solo porque reconoce la realidad diversa de las mujeres migrantes, sino también porque ofrece una perspectiva justa que destaca la fuerza, la creatividad y la resiliencia que surgen en medio de la movilidad. Es clave incorporar un enfoque de derechos, feminista e interseccional en las políticas de cooperación al desarrollo, las de gestión de los flujos migratorios, las de protección de las mujeres migrantes y las de integración de las poblaciones migradas en las sociedades de destino. Una sociedad que ponga las vidas, y a las mujeres, en el centro.
Fuente: theglobalsentinel.org