Unas 185.000 personas que huyen de la guerra de Sudán permanecen estancadas en “zonas peligrosas” en la frontera entre ese país y Chad, y no pueden ser reubicadas porque las organizaciones humanitarias carecen de fondos, lamentó este martes la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur).
Desde el estallido de la guerra en Sudán, en abril de 2023, cerca de 600.000 personas han huido a Chad, donde han tenido que instalarse en “asentamientos improvisados y superpoblados a lo largo de la frontera”, según Acnur.
Así, la ONU y sus socios estiman que necesitan unos 630,2 millones de dólares para responder a sus necesidades humanitarias, pero sólo han conseguido el 6 %.
La guerra, que ha dejado más de 14.000 muertos, empezó por la rebelión de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) contra las Fuerzas Armadas sudanesas.
El conflicto ha provocado además una de las peores olas de desplazamiento del mundo, con más de 8,5 millones de desplazados internos y refugiados. EFE
Fuente: Infobae