Ginebra, 13 mar (EFE).- Agencias de la ONU solicitaron este miércoles a la comunidad internacional 852,4 millones de dólares para asistir a más de 1,3 millones de rohinyás que desde hace más de siete años han tenido que refugiarse en Bangladesh para huir de la persecución en la vecina Birmania, que continúa a día de hoy.
“Los refugiados rohinyás continúan en un limbo legal y dependen de la asistencia humanitaria para sobrevivir en condiciones de hacinamiento, expuestos a problemas de inseguridad y desastres naturales”, destacó un comunicado de Naciones Unidas.
ACNUR recuerda que un 95 % de las familias rohinyás en Bangladesh se encuentran en situación de vulnerabilidad, especialmente en el caso de mujeres y niños, que componen tres cuartas partes de la población refugiada.
Agencias humanitarias y Gobierno de Bangladesh prometen con la ayuda solicitada facilitar a la comunidad refugiada alimentos, agua potable, vivienda, asistencia sanitaria, educación y oportunidades de trabajo, en un momento en el que la crisis de los rohinyás apenas recibe atención internacional, eclipsada por otros conflictos.
Entretanto, en la vecina Birmania muchos rohinyás continúan siendo perseguidos por la Junta Militar, y tras décadas de sistemática discriminación y desplazamiento forzado viven hoy esencialmente prisioneros en poblados y campos de internamiento, según denunció recientemente el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos Volker Türk.
Desde noviembre de 2023 la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos que dirige el austríaco ha recibido denuncias de al menos 200 asesinatos de rohinyás en el estado de Rakhine, donde vive la mayor parte de ese pueblo de religión musulmana.
Los ataques continúan alimentando el prolongado éxodo de esta etnia, y en ese sentido Türk recordó que el pasado año 5.000 rohinyás emprendieron peligrosos viajes en barco para huir a otros países, mientras unos 150.000 se desplazaron a diversas zonas del país. EFE
Fuente: Infobae