En Cúcuta, la Unión Europea reafirmó su compromiso con el país al anunciar un nuevo apoyo presupuestario para atender a la población migrante. La ayuda económica es vital. Sin embargo, Mario Mariani, jefe para América del instrumento de política exterior de la Unión Europea, señala que el bloque es importante en un campo más amplio: favorecer el diálogo entre naciones para una mayor y necesaria integración.
Camilo Gómez Forero
Una cosa es leer sobre los proyectos en un despacho y otra muy diferente es verlos en acción en una visita de campo. Eso es lo que piensa Mario Mariani, jefe para América del instrumento de política exterior de la Unión Europea (UE), quien visitó el pasado 19 de noviembre por primera vez la frontera colombo-venezolana junto con altos funcionarios del bloque europeo, del Gobierno Nacional y de instituciones y organizaciones que acompañan a Colombia en la respuesta frente al desafío migratorio para hacer un balance de los programas para los migrantes.
“Lo que más me chocó, antes de ver a las personas, fue ver una frontera cerrada, porque lo más bonito que ha hecho la UE es quitarlas para que haya fluidez. Cada vez que veo una frontera cerrada recuerdo cuando todo era más difícil en mi continente”, contaba Mariani al borde del puente Simón Bolívar, en Cúcuta.
La UE no solo es un referente en el desarrollo de políticas para sacarle provecho a la migración y en el manejo de crisis migratorias, sino que ha sido uno de los aliados más valiosos de Colombia para hacerle frente a su propio desafío migratorio. En Cúcuta, el bloque reafirmó su compromiso con el país al anunciar un nuevo apoyo presupuestario de $35.000 millones (8 millones de euros), el cual estará dirigido al Ministerio de Comercio, Industria y Turismo para que se promuevan los emprendimientos de migrantes y colombianos para aumentar la empleabilidad. También donó dos unidades móviles para ayudar al proceso de registro y regularización de migrantes. En conversación con El Espectador, Mariani habla un poco sobre las ayudas y el panorama de la colaboración europea en la región.
Uno de los dos enfoques de la más reciente donación de la UE para Colombia estuvo dirigido hacia la promoción de los emprendimientos de migrantes. ¿Por qué es tan importante la integración económica de estas personas?
Primero, suple una necesidad vital para los migrantes y las comunidades de acogida, de tener unos recursos básicos para su bienestar y el de su familia, y hacer frente a sus necesidades. Pero, sobre todo, tenemos que ver el lado de la migración como una oportunidad para todos. Los migrantes como contribuyentes al desarrollo de un país y sus comunidades: gente que trabaja, que puede tener una empresa, una microempresa, y que de esa manera contribuye al bienestar de su comunidad y su alrededor, así como al país que lo acoge con compras, con actividades económicas, dar empleo y aportes al sistema de seguridad social. Por eso es fundamental enfocar nuestra acción en este tema para la acogida y el desarrollo socioeconómico.
Y también ayuda a la integración social…
Claro, también favorece la integración con las comunidades locales, la integración social y la reducción de la xenofobia, la cual viene del miedo a lo desconocido, así que esto ayuda a las personas a conocerse mejor y a ir más allá de los prejuicios negativos que puedan tener sobre la llegada de migrantes, a quienes ven, por desconocimiento, como un peso y no como una contribución o una oportunidad de crecimiento.
El otro enfoque de esta donación europea fue el de la regularización, y por eso entregaron dos unidades móviles para la identificación y registro de personas migrantes. ¿Nos puede recordar por qué es clave la regularización para sacarles jugo a los beneficios?
La regularización, en primer lugar, tiene un aspecto de seguridad legal y jurídica para permitirles a los migrantes tener un estatus claro que les da tanto derechos como deberes ante el Estado, y también es beneficioso para las autoridades del país para saber cuántas personas llegan y así buscar rutas para integrarlos en el país de una manera ordenada y clara. Al mismo tiempo, para las personas migrantes es fundamental la regularización para tener acceso a servicios básicos. Sabemos que Colombia, como otros países en América Latina, ha tomado una clara postura de dar acceso a servicios básicos como educación y salud, y para eso es necesaria la regularización. Asimismo, hay beneficios en el aspecto socioeconómico, pues contar con un estatuto de regularización permite que los migrantes tengan la oportunidad de integrarse a través de otras actividades económicas, acceder a créditos en bancos y así expandir sus propias empresas. Sin un estatuto legal y la regularización, los desafíos serían mucho mayores. Por todo esto tenemos interés en apoyar los mecanismos de regularización del Gobierno Nacional, entendiendo que el sistema es particularmente complejo si miramos los números que hay que gestionar.
Fuente: elespectador.