El Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas expresó su inquietud sobre las dificultades en el país para abordar las desapariciones de migrantes en Darién y la falta de investigación de estos casos en la ruta selvática.
También recomendó crear una base de datos de migrantes desaparecidos, para facilitar su búsqueda.
Comité alerta sobre muertes de migrantes
Este jueves no fue un día cualquiera para los moradores de la comunidad de Bajo Chiquito, comarca Emberá. En esta zona, en el corazón de la selva de Darién, se encontraron dos osamentas y un cuerpo en descomposición.
Varios de los lugareños fueron testigos del macabro hallazgo. “Definitivamente son migrantes, ya que nadie de la comunidad ha desaparecido”, dijo uno de ellos, quien prefirió que no se publique su nombre.
Este hallazgo se une al de septiembre pasado, cuando se ubicaron 12 cadáveres en la misma zona. Es más, los registros oficiales dan cuenta que en lo que va de este año, en el que han transitado por el país más de 125 mil migrantes irregulares, se han reportado casi 60 decesos en esta población.
Lola Pérez, una migrante venezolana, contó que el pasado 11 de septiembre, mientras intentaba cruzar el río Turquesa junto a su familia, fueron arrastrados por una gran corriente y desaparecieron su hijo y su esposo.
“El río había crecido y, mientras pasábamos, se los llevó. Una vez llegamos donde las autoridades, les informamos, pero a día de hoy no hay noticias de ellos”, contó la mujer, quien aún sigue en Panamá, con la esperanza de que encuentren los cuerpos de sus familiares.
Se trata de una realidad que viene sucediendo en esa zona año tras año, aunque ahora la caravana de migrantes está optando por usar una nueva ruta para evitar el peligro que les representa caminar siete días por la selva hasta llegar a Bajo Chiquito. Viajan por el océano Pacífico y luego entran al país por Jaqué.
El llamado
Ante lo que viene ocurriendo con los migrantes en esa área inhóspita, el Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas expresó su preocupación, sobre todo por las dificultades en el país para abordar las desapariciones de migrantes en la selva del Darién, las fosas comunes localizadas a lo largo de la ruta migratoria y la falta de investigación e impunidad en estos casos.
Los expertos del Comité hicieron un llamado a Panamá a reforzar la cooperación con otros países en la región, para promover la búsqueda de migrantes desaparecidos e investigar su desaparición. También recomendaron que el Estado establezca una base de datos actualizada de migrantes desaparecidos para facilitar su búsqueda e identificación.
En ese contexto, indicaron que se debe garantizar que los familiares y allegados de las personas desaparecidas, independientemente del lugar en el que residan, tengan la posibilidad efectiva de obtener información y participar en las investigaciones y búsqueda.
El Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (Imelcf) es la entidad a la que corresponde revisar los cuerpos de migrantes cuando ocurre alguna tragedia. Su director, José Vicente Pachar, calificó la situación como compleja por la extensión de la zona donde suceden los hechos.
Pachar reconoce que este año se han reportado unos 60 migrantes muertos y han llevado a cabo entre 3 y 5 funerales solemnes, ya que la mayoría de los cuerpos no es reclamada.
“Nuestra morgue en Darién sólo tiene ocho espacios”, dijo el director de Medicina Legal y agregó que están armando una base de datos sobre los migrantes fallecidos, en caso de que familiares quieran venir a Panamá a identificarlos o llevarse los restos.
Por: Ohigginis Arcia Jaramillo
Fuente: prensa