Extorsiones, agresiones físicas y psicológicas, hacinamiento y lesiones en contra de miles de migrantes que se alojan en albergues o transitan por vías de comunicación del estado de Puebla, han documentado activistas y colectivos de derechos humanos.
Entre los casos más recientes destaca el desalojo de 16 indocumentados centroamericanos del Polideportivo Xonaca, lugar que hasta hace unos días carecía de las colchonetas suficientes para los migrantes que se resguardan en el inmueble, así como el atropellamiento de tres migrantes en la autopista México-Puebla durante un bloqueo registrado a la altura de Tlalancaleca.
El 10 de diciembre, integrantes del Seminario Fronteras, Migraciones y Subjetividades del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades “Alfonso Vélez Pliego”, de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) documentaron condiciones insalubres en las que vivían más de 500 inmigrantes, en su mayoría haitianos y venezolanos en el Polideportivo de Xonaca.
El colectivo identificó más de 80 niños en el lugar, quienes en su mayoría padecían de enfermedades respiratorias, por lo que pidieron atención a dicha caravana para que obtuvieran su visa humanitaria.
El mismo colectivo denunció el pasado 14 de diciembre que un grupo de 16 centroamericanos fueron desalojados del Polideportivo Xonaca en medio de la noche por agentes INM, después de que presuntamente les negaron las visas humanitarias y de trabajo que solicitaron al gobierno mexicano.
Una versión apunta a que sufrieron dicha represalia, luego de que supuestamente los migrantes insultaron a una agente de migración.
Asimismo, el 10 de diciembre, un vehículo del (INM) atropelló a dos migrantes centroamericanos de una caravana que bloqueó la autopista México-Puebla a la altura de San Matías Tlalancaleca, mientras los tripulantes se alejaban de una presunta agresión.
Los indocumentados cerraron la circulación en la autopista en protesta por los “abusos de los agentes de inmigración”, quienes supuestamente quisieron subir a dos de ellos a un vehículo e impidieron que la caravana subiera a tráileres para evitar un accidente como el ocurrido en Chiapa de Corzo.
Posteriormente, los inconformes lanzaron piedras a un vehículo del INM que durante su huida atropelló a dos migrantes, quienes quedaron tendidos en el pavimento.
La caravana era encabezada por el activista Irineo Mujica, quien denunció que los migrantes son objeto de agresiones e intimidaciones por parte de los agentes federales mexicano.
Fuente: lajornadadeoriente
