Dos refugiados vietnamitas retenidos por las autoridades en Tailandia dicen que temen por su seguridad después de que funcionarios de la embajada vietnamita los visitaran mientras estaban detenidos y los instaron a regresar a sus hogares, donde están acusados de ser activistas políticos.
Nguyen Thi Thuy y Ho Nhut Hung, ambos miembros del Grupo de Constitución de la sociedad civil que promueve la libertad de expresión y asociación en Vietnam, huyeron a Tailandia como refugiados en septiembre de 2018.
Ambos habían participado en protestas contra las leyes de ciberseguridad propuestas y la concesión de zonas económicas especiales a inversores extranjeros que sacudieron las principales ciudades de Vietnam hace cuatro años y provocaron arrestos masivos.
Thuy y Hung, que vivían con tarjetas de identificación de refugiados de la ONU vencidas en una provincia al norte de Bangkok, fueron arrestados por la Policía Real de Tailandia el 24 de julio de 2022, acusados de «inmigración ilegal y estadía ilegal» y llevados a un centro de detención de inmigrantes en el capital.
En una conversación telefónica con RFA esta semana, Thuy dijo que ella y Hung fueron visitadas en detención a principios de agosto por funcionarios de la embajada vietnamita en Bangkok que intentaron persuadirlos para que regresaran a Vietnam.
«Sorprendentemente, sabían el número de mi habitación y el número de identificación de mi prisión», dijo Thuy. «Nos dijeron que crearían las mejores condiciones para nuestra repatriación y nos advirtieron que si no aceptábamos y esperábamos la ayuda de la ONU, estaríamos en problemas».
Tanto Thuy como Hung rechazaron la solicitud de la embajada, dijo.
«Le dijimos a la embajada que ahora estamos usando tarjetas de identificación de la ONU en lugar de pasaportes vietnamitas y que, por lo tanto, esperaríamos hasta tener noticias de la ONU, incluso si tuviéramos que morir aquí», dijo.
En febrero de 2019, los funcionarios de refugiados de la ONU emitieron tarjetas con códigos de identificación para Thuy y Hung, pero las tarjetas vencieron el año pasado, dijo Thuy. Debido a que la pandemia de COVID les impidió visitar las oficinas de la ONU en persona, les dijeron por teléfono que sus tarjetas habían sido renovadas, pero no pudieron recogerlas y todavía estaban usando sus tarjetas antiguas cuando fueron arrestados, dijo.
Los detenidos en el IDC de Bangkok solo tienen acceso intermitente al agua y se les sirve comida deficiente, dijo Thuy. Sin embargo, su celda, que normalmente alberga hasta 60 mujeres, ahora está menos concurrida porque la mitad de las recluidas allí han sido trasladadas a otras instalaciones, agregó.
Activistas sociales en Tailandia han recaudado fondos de varias fuentes, incluidos vietnamitas expatriados, para ayudar a Thuy y Hung a pagar alrededor de 114 000 baht (3233 dólares estadounidenses) por concepto de fianza, multas por inmigración ilegal y tarifas de prueba de COVID, dijo Thuy.
Fecha de lanzamiento incierta
Han pasado dos semanas desde que Thuy y Hung fueron arrestados, pero aún no saben cuándo serán liberados y las llamadas de Thuy a la oficina de la agencia de la ONU para los refugiados en Bangkok no recibieron respuesta, dijo.
Las llamadas de la embajada vietnamita en Tailandia en busca de comentarios sobre el caso de Thuy y Hung esta semana no recibieron respuesta, pero un funcionario de la oficina de ACNUR en Bangkok dijo que estaba al tanto de la situación y prometió informarlo a un alto funcionario.
Además, Nguyen Hoan An, un activista social vietnamita que también es refugiado en Tailandia, dijo a RFA que los refugiados detenidos generalmente son liberados el mismo día que se paga su fianza.
Los detenidos no pueden ser obligados a regresar a casa si rechazan las solicitudes de repatriación de su embajada, agregó An. Sin embargo, señaló que la policía tailandesa ingresó recientemente a locales alquilados sin órdenes judiciales para arrestar a inmigrantes ilegales e informó falsamente que los arrestos se llevaron a cabo en la calle.
Las solicitudes de ayuda de los refugiados al ACNUR ya los bufetes de abogados a menudo se procesan con lentitud o no reciben respuesta, dijo An.
“Hacemos un llamado a las comunidades, los grupos de medios y especialmente las organizaciones de protección de refugiados para que presten más atención”, dijo An. «Esperamos que si los refugiados son arrestados o enfrentan riesgos de seguridad, actuarán rápidamente para que no sean intimidados y extraditados a Vietnam».
En enero de 2019, el bloguero de RFA Truong Duy Nhat fue arrestado por agentes de la policía vietnamita en Bangkok y devuelto a Vietnam solo un día después de presentar una solicitud de estatus de refugiado ante ACNUR. Más tarde fue juzgado y sentenciado a 10 años de prisión en virtud del artículo 356 del Código Penal de Vietnam por «abusar de su posición oficial» en la compra de bienes inmuebles.
Fuente: mundonoticias.org
