Las deportaciones de migrantes centroamericanos a dos puntos apartados de la frontera de Guatemala con México están causando furor entre los defensores de los refugiados.
CIUDAD DE GUATEMALA – Reacciones de rechazo se han levantado en Guatemala por el envío de migrantes centroamericanos desde Estados Unidos a apartados puntos de la frontera con México que carecen de los protocolos adecuados para la recepción de personas deportadas.
Autoridades de la Casa del Migrante expresaron su indignación por las devoluciones automáticas a los puntos fronterizos de El Ceibo y El Carmen, porque aseguran que violentan el derecho a pedir protección internacional.
Además, exigieron acciones inmediatas a los gobiernos involucrados, alegando que la situación deja en alta vulnerabilidad a los migrantes, principalmente a niños, adolescentes y unidades familiares.
Mauro Verzeletti, director de esa organización que apoya a los migrantes, solicitó al estado de Guatemala que genere condiciones para ofrecer la atención y protección adecuada a los migrantes.
“Exigimos a los estados involucrados a que cumplan con las obligaciones requeridas en los convenios internacionales en materia de migración, asilo y refugio. La protección internacional es un derecho internacional, sin fronteras”, dijo Verzeletti.
Agregó que preocupa que los gobiernos de la región centroamericana se sumen a las acciones que contradicen los marcos normativos nacionales e internacionales pues “han recibido migrantes expulsados por las autoridades migratorias de Estados Unidos y México”.
Así mismo, el consultor en temas migratorios Fernando Castro indicó que se están violando los derechos de los migrantes.
“No se les está brindando la recepción debida lo que también atenta contra los derechos humanos de las personas migrantes, vienen muchos menores, que es el sector más vulnerable de la migración por lo cual debe corregirse inmediatamente”.
Recordó que las fronteras de Estados Unidos no están abiertas, para evitar que más personas paguen grandes cantidades de dinero para llegar hasta allí y sean enviados de regreso, como ha sucedido en los últimos días. Además, criticó la falta de acciones de las autoridades guatemaltecas.
“No se cuenta con la recepción adecuada por parte de las autoridades del gobierno de Guatemala a través de la cancillería guatemalteca y el Consejo Nacional de Atención al Migrante”, señaló.
Por su parte, el secretario del Consejo Nacional de Atención al Migrante, CONAMIGUA, Raúl Berríos, dijo que la nueva modalidad de deportaciones fue sorpresiva para Guatemala y aunque respetan la soberanía de Estados Unidos, piden que se reanude el envío de migrantes hacia las fronteras que tienen las condiciones adecuadas para recibirlos.
“Nosotros estamos dispuestos a dar la mejor asistencia, pero por esa frontera se dificulta brindar una atención adecuada a los migrantes retornados guatemaltecos y a los migrantes en territorio nacional que son salvadoreños y hondureños”, explicó Berríos.
Al mismo tiempo, dijo que se ha dado apoyo a aproximadamente 1.000 migrantes con llamadas telefónicas para que se comuniquen con sus familiares y espera seguir brindando ayuda a quienes llegan a la frontera desorientados, sin recursos y lejos de su lugar de origen.
“Fue algo sorprendente que empezaron a enviar a personas por esa frontera. Nosotros enviamos a nuestro personal de forma inmediata y urgente para velar que se les respeten los derechos a los migrantes”, añadió.
Berrios advirtió que llegan migrantes hombres, mujeres, pero también niños, que son aún más vulnerables al peligro. “La mayoría son guatemaltecos, pero también hay hondureños y salvadoreños y se les dificulta acercarse a sus fronteras”.
Fuente: vozdeamerica
