Colombia detuvo en menos de 15 días a 23 migrantes asiáticos en el mar Caribe, una de las nuevas rutas de los viajeros indocumentados con rumbo a Estados Unidos, informó este lunes la Armada.
Seis de ellos de nacionalidad china viajaban en una embarcación “ilegal” que “no contaba con las condiciones mínimas de seguridad” cerca al Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, según un comunicado.
Los viajeros fueron “puestos a disposición” de Migración Colombia, la autoridad que determinará si los expulsa hacia Ecuador, país al que suelen llegar los asiáticos por no necesitar visa antes de su cruce irregular a Colombia, según explicó la Armada la AFP.
El capitán del barco y otro tripulante, ambos colombianos, fueron capturados.
El 18 de mayo guardacostas encontraron a otros 15 chinos y dos vietnamitas, entre ellos un menor de edad, cerca de las islas.
Según las autoridades intentaban llegar a Centroamérica para seguir su recorrido hacia Estados Unidos.
Ya son 135 migrantes, entre ellos 29 menores, hallados en 2023 en aguas del Caribe, según la Armada. En abril, el Ministerio del Interior alertó sobre una “grave crisis humanitaria” en las islas.
San Andrés, Providencia y Santa Catalina se han convertido en una ruta común para miles de migrantes latinoamericanos, especialmente venezolanos, y asiáticos.
Ante los riesgos que enfrentan en otras rutas peligrosas como la selva del Darién, en la frontera colombo-panameña, “se ha vendido esta ruta como una ruta VIP”, explicó a la AFP el capitán de la Armada Santiago Coronado.
De acuerdo con la Armada, el tránsito por el archipiélago empezó alrededor de 2016 y en el último año se ha popularizado debido al aumento de la “migración venezolana”.
En los primeros cuatro meses del año, más de 100.000 personas han atravesado el Darién según Naciones Unidas, que prevé que la cifra llegará a las 400.000 personas al final de 2023.
Fuente: barrons.