OGOTÁ (COLOMBIA). Viernes 9 de julio de 2021 (AGENCIA DE NOTICIAS RPTV). Con cerca de 6 millones de migrantes y refugiados venezolanos en el mundo y siendo Colombia el país con mayor número de ellos, son también millones las historias de personas que arriesgan su vida intentando llegar a algún país que les ofrezca estabilidad.
En la frontera colombo-panameña, una zona que luce en partes iguales, famosa por ser el escenario natural de una maraña selvática, hostil e impenetrable, conocida como el Tapón del Darién, y olvidada porque de acuerdo con sus propios habitantes y autoridades locales, la zona es controlada por grupos guerrilleros y paramilitares que se lucran del narcotráfico y el contrabando.

Justo allí, migrantes venezolanos arriesgan todo, incluso su vida, para llegar a Estados Unidos. Cientos de ellos llegan hasta Necoclí, un punto obligado de paso para miles de migrantes decididos a adentrarse a la que es considerada como la selva más intacta y peligrosa del mundo.
“He recorrido ya tres países del mundo para buscar una mejor vida”, le dice a La Voz de América Luis Felipe Beltrán – Migrante Venezolano.
A diario, más de 600 migrantes, entre cubanos, haitianos, africanos y venezolanos emprenden esta travesía incierta, y hasta cierto punto, misteriosa.

“No todo el mundo llega allá y espero llegar allá con mis compañeros que están aquí. Llegar allá sanos y salvos, que Dios nos cuide en el camino y nos bendiga mucho”, cuenta Luis Felipe Beltrán – Migrante Venezolano.
“Da miedo. Lo que hemos escuchado es que han dejado niños ahí, que se encuentran los huesitos de unos niños”, relata Anyuri Dairen Mendoza – Migrante venezolana.
A través de un trayecto de hora y media, los migrantes son transportados en botes, cancelan 50 dólares para llegar hasta Capurganá que es el municipio colombiano donde inicia la selva del Tapón del Darién.
Un viaje y una trampa mortal para miles de migrantes, al acecho están las estructuras criminales que operan en la zona y que, con frecuencia, los reclutan, de acuerdo con las autoridades colombianas.
“Se ve presionada por grupos armados organizados como el Clan del Golfo que a través de sus estructuras en el Urabá antioqueño y en el Urabá chocoano pretenden mantener un control de la ilegalidad”, explica el Coronel Óscar Ortíz – Comandante de la Armada Nacional en el Urabá Antioqueño.
Entes como ACNUR, la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados, que trabajan en esta región, afirman que faltan estrategias de prevención para proteger e informar a estas personas que quieren hacer tránsito hacia Centroamérica a través del Darién.
“El fenómeno migratorio con dirección a Estados Unidos todavía requiere mayor esfuerzo en su atención, en la prevención de situaciones de vulneración de derechos humanos. Es por esto que todavía necesitamos seguir construyendo campañas más fuertes para la prevención y atención del fenómeno”, comenta César Mesa – Portavoz de Acnur en Antioquia.
Pero lejos de las campañas y las estrategias que se definen en el papel, la realidad muestra cada día el paso de migrantes decididos a encontrarse con su sueño de llegar al norte.
Fuente: noticiasrptv