Por: José Rolando Sarmiento Rosales
Interesados como hemos estado desde que surgió la primera caravana masiva de inmigrantes buscando llegar a territorio de Estados Unidos, para conocer cómo o cuándo se organizan, cuáles son las motivaciones que han llevado a miles de compatriotas a reunirse en la terminal de transportes de San Pedro Sula, con sorpresa nos enteramos, gracias a varios reportes de Europa News, que este fenómeno realmente tiene su origen en miles de inmigrantes de variada nacionalidad que cruzan el Tapón del Darién provenientes desde Colombia y se encuentran detenidos en territorio de Panamá.
“La crisis migratoria centroamericana no empieza en Nicaragua u Honduras, comienza en la frontera entre Panamá y Colombia. Cada año, miles de migrantes cruzan la densa selva que divide a América del Sur con América Central, conocida como el Tapón del Darién. Es una selva tropical llena de peligrosos animales y extremas condiciones climáticas. Además de bandas criminales y paramilitares. Pero los caminantes se enfrentan a todo, aferrándose al sueño de llegar a Estados Unidos. Un mejor futuro para sus hijos es la gasolina para sus pies”. «Mi felicidad será completa cuando llegue a Estados Unidos», suspira Ahmed Kabeer, un sudanés que cuenta que tres de sus compañeros de viaje en el trayecto se le han adelantado.
Una gran parte de los migrantes proviene de Haití y Cuba, y de diferentes países de África. Inclusive de Afganistán y Siria. Recuperan fuerzas en los diferentes campamentos ubicados a lo largo de la frontera, en el lado panameño, en la provincia del Darién. El gobierno y la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) asisten a los migrantes mientras se preparan para recibir otra caravana en los próximos días. A principios de febrero, unas 1,250 personas, entre ellas 89 niños, estaban apostadas en los campamentos. Más de 47,000 personas han cruzado la selva del Darién desde 2017, pero se espera que las cifras se reduzcan a menos de 6,500 migrantes en 2021, debido a la pandemia de coronavirus, según las estadísticas oficiales.
Cientos de migrantes se encuentran atrapados en la frontera entre Colombia y Panamá. La mayoría son haitianos procedentes de Brasil y Chile. Llevan más de una semana en las playas de la población colombiana de Necoclí. Viven en tiendas de campaña en las playas. Esperan para poder pasar porque no tienen otra opción. Su objetivo es llegar a Estados Unidos. Pierre Estefani, es uno de los migrantes haitianos y señala: «No tenemos plata, aquí no trabajamos, estamos viviendo con nuestro ahorro. El ahorro con el que tenemos que hacer el viaje, lo hemos gastado y ahora no tenemos nada». El municipio en el que se encuentran no tiene los recursos económicos para poder mantenerlos. Carlos Alberto Guevara, otro de los migrantes apunta: «La misma autoridad colombiana y el alcalde nos están diciendo prácticamente que tenemos que alquilar una lancha de 400 dólares clandestina. Yo no quiero hacer eso con mi hijo”.
«Por eso las autoridades colombianas han decretado la emergencia sanitaria y humanitaria. El director de migración de Colombia, Juan Francisco Espinosa ha apuntado que están trabajando para garantizar la seguridad sanitaria de los migrantes y los habitantes de la zona. No habrá apertura de fronteras debido al coronavirus. Wilson Patiño, director de Migración de Colombia en Antioquía, señala: “Este no es un momento para movilizarse, por el contrario, es un momento para resguardarse, con el fin de minimizar los riesgos de contagio de Covid-19”. Colombia lleva con sus fronteras terrestres y fluviales cerradas desde el 16 de marzo de 2020. La pandemia ha dejado ya más de 2 millones de contagios y más de 53,000 fallecidos en el país.
La otra fuente de confirmación del fenómeno migratorio masivo lo obtenemos de una noticia aparecida en LA VOZ de AMÉRICA: Guatemala anuncia plan de contingencia para futuras caravanas de migrantes. De acuerdo con los datos del Instituto de Migración, se espera que los próximos movimientos migratorios también estén compuestos por asiáticos, cubanos y haitianos. La iniciativa surge después de que hace algunos días el mismo director Guillermo Díaz afirmara, en conferencia de prensa, que tienen información que apunta que en días venideros Guatemala recibirá una ola de caravanas de migrantes con personas de lugares tan lejanos como África y Asia que buscan cruzar por Centroamérica rumbo a Estados Unidos. «Hemos obtenido información sobre la probabilidad de que estos flujos migratorios lleguen a Guatemala» en su ruta hacia Estados Unidos, dijo el director de migración del país.
Se puede concluir que en medio de los hondureños, salvadoreños y nicaragüenses, los haitianos, cubanos, asiáticos y africanos, se escudan y confunden en la larga marcha por territorio guatemalteco y mexicano hacia suelo norteamericano.
Fuente: latribuna
