Seis millones de venezolanos se han visto forzados a desplazarse, de los cuales 80% se han asentado en Latinoamérica, dijo Betilde Muñoz-Pogossian de la OEA
CARACAS.- Durante 2021, más de 1.500 migrantes venezolanos atravesaron el Tapón del Darién, una zona selvática ubicada entre Colombia y Panamá. Dicha cifra representa un aumento de 2.000% en el flujo de migrantes venezolanos por esta riesgosa ruta si se compara con los números de 2017, cuando solo 76 migrantes del país caribeño cruzaron esa zona.
La información la dio Betilde Muñoz-Pogossian, directora de inclusión social de la Organización de Estados Americanos (OEA), informó el portal web El Nacional.
“Así tendrá que ser la situación de estas personas que prefieren pasar por todos estos riesgos que quedarse donde están”, comentó en una entrevista para el programa Buenos Días de VPI Tv.
El Tapón del Darién está considerada como la ruta migratoria más riesgosa de América Latina.
Muñoz-Pogossian señaló que la migración es una constante en el continente. Sin embargo, recientemente se ha presentado un incremento importante en el número de persona migrando, con importantes cifras de migración intrarregional.
“Por ejemplo, seis millones de venezolanos se han visto forzados a desplazarse, de los cuales 80% se han asentado en países de América Latina”, expresó.
Muñoz-Pogossian explicó que en el trayecto migratorio los venezolanos se enfrentan a muchas condiciones de riesgo y a la posibilidad de ser víctimas de la violencia.
“Las mujeres se enfrentan a mucha violencia solo por el hecho de ser mujeres y hay puntos críticos donde están expuestos a una gama de riesgos. Por ejemplo, en el Tapón del Darién hay violencia por guerrillas o crimen organizado. También hay redes de trata de las cuales sabemos que 70% son mujeres o niños”, señaló.
La zona selvática del Tapón del Darién, que separa a Colombia de Panamá, es usada por grupos armados para el envío de drogas a Centroamérica que tienen como destino los Estados Unidos, informó la Voz de América.
Esta selva de 575.000 hectáreas que no cuenta con vías de comunicación, representa una trampa mortal para aquellos que buscan su camino a EEUU. Los migrantes que caen en manos del Clan del Golfo y los otros grupos armados que controlan el lugar, son obligados a seguir su ruta con cargas de droga.
Fuente: El Nacional, Venezuela