Los países por los que los extranjeros ingresan a Suramérica son Brasil, Perú y Ecuador.
¿Por qué ciudadanos de países como Haití o de otras regiones como el África y Asia deciden transitar por una ruta identificada entre las más peligrosas en el mundo, para llegar a países como Estados Unidos y Canadá?
Un análisis desde la academia aporta a la comprensión de este fenómeno migratorio que además está ocurriendo desde hace aproximadamente dos décadas.
Los migrantes que hoy están en los departamentos del pacífico colombiano han recorrido, en parte a pie, al menos dos países más.
María Clara Robayo, investigadora del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario y experta en fenómenos migratorios explica que todos los ciudadanos extranjeros que circulan hoy por el territorio nacional de forma irregular, comparten condiciones de pobreza e inseguridad en sus países de origen.
Se trata de “una migración muy cercana a migraciones forzosas, casi desesperada y en la que eligen rutas muy difíciles en donde se sabe que su vida está puesta en peligro diariamente”.
Atravesar la selva del Darién
Mientras se reporta presencia de ciudadanos haitianos, cubanos y africanos, entre otras nacionalidades en departamento como Nariño, el Cauca, el Valle, Chocó y Antioquía, en la frontera con Panamá el tránsito de migrantes es constante.
Raúl López, coordinador de proyecto en la organización Médicos sin Fronteras, relata que “la ruta en temporada seca dura entre 4 y 5 días para personas que están en buena condición física, si hay mujeres embarazadas y personas adultas se puede extender a más de una semana, en temporada de lluvias puede llegar a 18 días”.Audio
[AUDIO] Las razones de ciudadanos extranjeros para migrar por una de las rutas más peligrosas00:0000:00
No hay un dato oficial del número de migrantes que llegan al Darién, tampoco de quienes han fallecido en su recorrido.
La investigadora Robayo revela que “estas migraciones entran por Brasil, Perú, Chile y Ecuador por las condiciones más favorables de seguridad para estas rutas clandestinas que cobran las vidas de muchísimos migrantes que al ser irregulares son invisibles”.
La situación de ilegalidad en los países hace que los migrantes, para pasar desapercibidos para las autoridades, transiten las mismas rutas del narcotráfico y se encuentren con grupos armados ilegales sufriendo consecuencias como lo relata Fabiola Pintado, Gestora de actividades médicas en Panamá.
“La mayor parte de las personas a las que hemos atendido nos relatan eventos de robo y dentro de estos eventos hay una gran incidencia, en cuanto a las mujeres, de eventos de violencia sexual por parte de personas armadas”, indica la profesional de Médicos sin Fronteras.
Se estima que el fenómeno migratorio que toca el pacífico colombiano tuvo sus orígenes hacia 2001. Llegar a Estados Unidos o Canadá representa para los migrantes la posibilidad de pedir asilo en esos países. Al salir de Colombia si logran pasar la selva del Darién aún quedarán cerca de 4000 mil kilómetros para cumplir su objetivo.
Fuente: rcnradio