En Cúcuta, el bordado se ha convertido en una poderosa forma de expresión para las mujeres que decidieron cruzar la frontera.
Se trata del libro bordado “Memorias textiles desde la frontera”, una secuencia del proyecto “Memorias textiles”, ambos realizados por la fundación Moiras en Cúcuta, letra por letra, en las manos de mujeres migrantes que cruzaron la frontera entre Colombia y Venezuela.
Ambos libros relatan, a través del bordado, los recuerdos y las emociones de la migración, sobre lona costeña y liencillo, lo que conllevó a más de 10 horas de trabajo para su realización.
Según Andrea Quiñónez, directora de la fundación, el primer libro ‘Memorias textiles’, fue producto de un proceso construido con mujeres del corregimiento de Juan Frío, en Villa del Rosario, entre 2018 y 2022.
Ya para el segundo libro, titulado ‘Memorias textiles desde la frontera’, en el que reposan todos los relatos migratorios de las mujeres participantes, su producción se dio en medio un proyecto con el Ministerio de Cultura, que buscó describir experiencias de migrantes venezolanas y colombianas retornadas que llegaron al asentamiento humano Alfonso Gómez entre 2021 y 2022.
La fundación realizó una serie de talleres con el fin de acercarse a las mujeres, conocerse y que conocieran a las talleristas, para posteriormente pedirles que escribieran un pequeño relato de su vida, dejando como resultado recuerdos de la vida antes de migrar, el paso fronterizo y la actualidad.
Quiñonez mencionó que la técnica del bordado, no fue más que una “excusa” para reconstruir la memoria de las mujeres, de juntarse, hablar y poder recuperar ese tejido social que se desvanece si no se habla y se cura debidamente.
Además, la relación entre el bordado y la reivindicación de las labores que han sido asociadas históricamente a las mujeres, fue uno de los aportes que se dieron desde el feminismo a estos bordados que vienen cargados de todos los sentimientos que conlleva la migración para las mujeres.
Una de las participantes, según cuenta la directora, mencionó que “no sabía que tenía tanto por llorar”, y por ello el bordado, como una herramienta de juntaza, de llamado a la conversación y la sanación, es la mejor excusa para resistir desde aquello que antes significó una forma de opresión para las mujeres, pero que ahora es una herramienta reivindicadora.
En octubre del 2020 en Cúcuta se presentaron las páginas del libro ‘Memorias textiles’ en el Museo Norte de Santander y actualmente se encuentra en Medellín en el marco de una gira que pretende dar a conocer estos procesos tan significativos.
Por otro lado, “Memorias textiles desde la frontera” ha sido expuesto por la fundación en cada uno de los espacios que han tenido la oportunidad de presentarlo y reposa en la Casa Moiras en espera de ser expuesto en el Museo Norte de Santander.
Casa Moiras se encuentra ubicada en la calle 2 # 9E-40 del barrio Quinta Oriental y allí las personas pueden observar y conocer las historias contadas a través de este arte propio de la fundación.
Fuente: estoyenlafrontera