Texto por:Manuela Cano
Según reportaron trabajadores humanitarios este sábado, un ataque aéreo presuntamente hecho con dron, mató a al menos 56 personas y dejó 30 más heridas. Hasta el momento, ni las fuerzas armadas etíopes ni el primer ministro, Abiy Ahmed Ali, se han pronunciado. El hecho se da en el marco de la apertura hacia la reconciliación por parte del Gobierno con las fuerzas rebeldes de Tigray.
Un campamento de refugiados fue alcanzado por un ataque aéreo en la región de Tigray en Etiopía. Según varios trabajadores humanitarios en diálogo con Reuters, 56 personas fallecieron y 30 más, incluidos niños, resultaron heridos.
Uno de los trabajadores humanitarios dijo que visitó uno de los hospitales a los que fueron trasladadas varias de las personas que necesitaban asistencia médica. También aseguró que el campamento albergaba una gran cantidad de ancianos y de niños.
“Me dijeron que las bombas llegaron a medianoche. Estaba completamente oscuro y no podían escapar”, agregó.
Hasta el momento, el Gobierno etíope no se ha pronunciado sobre los hechos. Pero ya en el pasado ha negado atacar a civiles durante los 14 meses de conflicto con las fuerzas del Tigray.
Por su parte, el portavoz del Frente de Liberación Popular de Tigray (FLPT), Getachew Reda, dijo en su cuenta de Twitter: “Otro insensible ataque con drones de Abiy Ahmed en un campo de desplazados internos (IDP) en Dedebit ha cobrado vidas de 56 civiles inocentes hasta ahora”.
El de este sábado no es el único ataque que ha sacudido la zona de Tigray. Según cifras recolectadas por Reuters al menos 146 personas murieron y 213 resultaron heridas en ataques aéreos desde el 18 de octubre en esa zona.
Además, la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) había informado de un ataque aéreo que mató a tres refugiados eritreos, dos eran niños.
Un ataque en medio de señales de reconciliación
El ataque se da en un momento en el que el primer ministro etíope, Abiy Ahmed Ali, ha mostrado voluntad de diálogo y reconciliación. El viernes el Gobierno anunció la liberación de varios líderes de la oposición para comenzar con las conversaciones. Varios de ellos eran miembros del Frente de Liberación Popular de Tigray.
El ministerio de Justicia aseguró que la amnistía buscaba un diálogo nacional ”exitoso e inclusivo”. De igual manera, el mes pasado se aprobó un proyecto de ley que establecía una comisión de diálogo nacional.
Además, el ataque se presentó un día después de que el primer ministro emitiera un mensaje de reconciliación por la Navidad ortodoxa.
Sin embargo, el Frente de Liberación Popular de Tigray ha sido enfático en su escepticismo sobre las intenciones del Gobierno etíope. De hecho, su portavoz afirmó en un tweet que: “Su rutina diaria de negar medicamentos a niños indefensos y de enviar drones contra civiles va en contra de sus afirmaciones falsas”.
Además, acusan al primer ministro de imponer un bloqueo a la región que ha provocado una situación crítica de hambre y falta de elementos básicos. Sin embargo, el Gobierno niega dichas afirmaciones.
El conflicto en dicha región data de noviembre de 2020, cuando las tropas federales etíopes entraron en guerra con las fuerzas del Tigray. Desde entonces se estima que decenas de miles de personas han muerto por los combates.
EE. UU. y la Unión Europea reaccionan frente a la situación en Tigray
Esta semana, el enviado estadounidense a Etiopía, Jeffrey Feltman, había aplaudido la liberación de los opositores.
“Damos la bienvenida a la liberación de prisioneros como un movimiento positivo en ese contexto”, dijo un portavoz del Departamento de Estado.
Por su parte, la Unión Europea considera que a pesar de la determinación del Gobierno, el panorama del conflicto sigue siendo preocupante.
“Todas las partes deben aprovechar el momento para poner fin rápidamente al conflicto y entrar en diálogo”, sentenció el alto representante para Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell.
Fuente: france24.
