La llegada de venezolanos a Denver, en Estados Unidos, durante el último año, ha colapsado la ciudad.
La calle en el vecindario Highland está irreconocible tras la llegada de casi 30.000 migrantes venezolanos para los que se han instalado tiendas de campaña, una estaría afuera de uno de los cinco hoteles que el Departamento de Servicios Humanos de Denver utiliza para albergar a 2.700 extranjeros y el aumento de las carpas en las calles obstaculiza el tránsito de vehículos.
Además reciben apoyo de voluntarios de organizaciones que les llevan alimentos, medicinas y ropa.
Fuente: noticiaypunto