Un informe de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) reveló que más de siete millones de niños refugiados en edad escolar no reciben educación formal, sobre todo a causa de la guerra en Ucrania.
El Alto Comisionado para los Refugiados, Filippo Grandi, indicó que la disminución de la asistencia a la educación formal se da principalmente en los niveles más altos de la escala educativa, cuanto más se avanza en la escala, más pronunciada es la disminución de las cifras, debido a que las oportunidades de estudiar en el nivel secundario y terciario son limitadas.
Según el ACNUR, el 20% de los refugiados vive en los 47 países menos desarrollados del mundo y más del 75% se ubica en países de ingresos bajos y medios, encareciendo los costos de la educación, sobre los más pobres.
A finales del 2022 había más de 700 mil refugiados y 5,3 millones necesitaban protección, la mayoría de estos eran venezolanos que se encontraban en Colombia (2,5 millones), Perú (976,400) y Ecuador (555,400), entre otros. La diferencia entre los estudiantes nacionales y los refugiados son grandes.
El informe hace hincapié en que si los niños refugiados se quedan atrás, no se alcanzará el Objetivo de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas de garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad para todos, y plantea que, en cambio, cuando tienen acceso a la educación pueden prosperar en beneficio de sí mismos y de los países de origen y acogida.
Fuente: pressenza