De acuerdo con estadísticas internacionales, las personas se desplazan de un país a otro, en busca de trabajo u oportunidades económicas, o para escapar de conflictos, persecuciones, terrorismo, violaciones o abusos de los derechos humanos. Hoy en día los flujos migratorios son complejos, es decir, hay personas que migran por cuestiones laborales y económicas, pero también hay un aumento sustancial de personas que huyen de su país de origen, por situaciones de violencia social, guerra o por temores fundados de que su vida está en peligro.Explican organizaciones internacionales que casi 3 de cada 5 migrantes internacionales (57,6%) se encuentran en algún país que forma parte de las regiones desarrolladas del mundo; 2 Europa (31,2%) y Asia (30,8%) que son los principales continentes receptores de la migración internacional, seguidos por la región de América del Norte (22,4%).

El Informe de la OIM, sobre las migraciones señala que la mayoría de los migrantes han sido marginados económica, social  o políticamente en sus países de origen, que les obliga a buscar  estrategias de supervivencia, como es el caso venezolano.

La migración venezolana es la mayor movilización humana de la historia reciente de la región. Los migrantes nativos huyen de la crisis humanitaria y económica que ha deteriorado la seguridad ciudadana y los estándares de vida en el país.

Según Acnur, cada día entre 4.000 y 5.000 venezolanos salen del país, la mayoría a pie, a un destino incierto, pero con la esperanza de un mejor futuro para sus familias. Su movilización está cambiando el rostro de América Latina y el Caribe para siempre.

La migración venezolana presenta diversas particularidades. Debido a su magnitud, por cuanto está generando una enorme presión en los países receptores, sobre todo en materia de salud, educación y empleo, los que han respondido con controles más estrictos.

La crítica situación provocada por esta oleada de migrantes ha llevado a 11 países de la región a aumentar los requisitos de ingreso a los migrantes y refugiados venezolanos, lo que sin embargo no detiene el flujo, pero sí su regularización.

Son casi 8 millones de venezolanos hombres, mujeres, ancianos y niños que han abandonado la patria, pese a la serie de vicisitudes, contratiempos y peligrosos riesgos que deben afrontar, para procurar un futuro cierto para sus familias.

Fuente: elnacional