Por: Albany Andara Meza | @AlbanyAndara, Foto por Mairet Chourio (@mairetchourio)
La diáspora venezolana ha expuesto a las mujeres que se quedaron en Venezuela a una sobrecarga de responsabilidades y a mayores vulneraciones de derechos fundamentales, advirtió la ONG Proiuris a través de un informe, el 4 de mayo de 2023.
«La crisis ha empujado a más mujeres en Venezuela a la pobreza y a la economía informal, mientras que la nueva realidad forzada de la ruptura de su núcleo familiar genera que aquellas en edad productiva tengan mayores limitaciones de desarrollo de carrera y que las adultas mayores hayan quedado solas o a cargo de sus nietos», apuntó la organización.
Durante 23 meses Proiuris llevó a cabo un estudio en 21 comunidades de 10 estados del territorio nacional y analizó los casos de 94 personas. Finalmente seleccionó a 33 mujeres, adultas mayores y adolescentes residentes en Venezuela, con miembros de su núcleo familiar en el extranjero.
Del grupo estudiado, el 55% indicó que el bajo poder adquisitivo les impide acceder a bienes y servicios esenciales. Respecto a la salud mental, 22% confesó que experimentan episodios de estrés, ansiedad y depresión, disparados por la separación forzada de sus familiares. Así mismo, 33% de las mujeres dijo que tienen a más de 4 integrantes de su familia fuera de Venezuela.
«Como tercera necesidad insatisfecha, el 15% comunicó que es la salud física. Este renglón se debe abordar de manera multidimensional, incluyendo a la posibilidad de tener acceso a diagnósticos y tratamientos preventivos y paleativos. Destaca en este apartado una arista complicada para las madres cabeza de familia y para sus hijas ya adolescentes relacionada con la salud sexual, reproductiva e higiene menstrual», reportó la ONG.
De acuerdo con la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes, conocida como RV4, en la actualidad hay alrededor de 7,24 millones de venezolanos migrantes y refugiados en el mundo.
La feminización de la pobreza en Venezuela
El informe presentado por Proiuris se titula «Mujeres Dejadas Atrás» e incluye siete categorías determinantes de las venezolanas que permanecen en el país. Entre ellas están las madres cabeza de familia, abuelas cuidadoras, niñas y adolescentes cuidadas por terceros, mujeres en condición de discapacidad, mujeres pendulares (se movilizan regularmente por los cuatro puentes fronterizos entre Venezuela y Colombia) y pensionadas.
También incluyen a las llamadas «mujeres logísticas», que son el centro de operaciones dentro de sus hogares o núcleos cercanos. La ONG alertó que la pobreza afecta alrededor del 81,5% de la población (según datos suministrados por la Encuesta de Condiciones de Vida 2022), pero las venezolanas son quienes sufren los mayores estragos.
«Lo cierto es que la feminización de la pobreza ha empujado a las mujeres a la economía informal y las ha dejado sin posibilidades de desempeñar una carrera profesional. Además, profundiza las barreras educativas y los riesgos asociados a las Violencias Basadas en Género (VBG), así como a sufrir enfermedades físicas y mentales», puntualizó la organización.
Fuente: efectococuyo