Recientemente, el titular de Interior Aleksandar Vulin aseguró que impedirá que esta nación se convierta en estacionamiento para migrantes y avizoró redadas bajo el pretexto de garantizar la seguridad de los ciudadanos serbios y de los propios refugiados.

Una de las rutas de Medio Oriente a Europa Occidental pasa por los Balcanes y durante el pico de la crisis migratoria de 2015 a 2018 más de un millón de extranjeros pasaron por Serbia.

Esta situación se agravó en el país balcánico por la escalada militar que tiene lugar hoy en Ucrania.

En múltiples ocasiones, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados instó a las naciones europeas a trabajar en conjunto para hallar una solución eficaz y humana a la crisis de indocumentados, que tenga en cuenta el respeto a la vida y derechos de esas personas.

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