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El repunte del tránsito de migrantes en el Mediterráneo central se ha hecho patente en las costas de Túnez, donde en apenas unos días han sido localizados los cadáveres de unos cien migrantes y refugiados, según un responsable sanitario de la ciudad de Sfax, que ha confirmado la llegada de todos estos cuerpos a la morgue local.
El repunte del tránsito de migrantes en el Mediterráneo central se ha hecho patente en las costas de Túnez, donde en apenas unos días han sido localizados los cadáveres de unos cien migrantes y refugiados, según un responsable sanitario de la ciudad de Sfax, que ha confirmado la llegada de todos estos cuerpos a la morgue local.
La Guardia Costera ha asegurado que, sólo el lunes y el martes, interceptó 17 embarcaciones con un total de 524 migrantes, en su mayoría procedentes del África subsahariana. También había tunecinos, en concreto 75, mientras que otros 71 han sido arrestados cuando se preparaban para cruzar el mar.
Las autoridades cifran en más de 1.800 los arrestos efectuados desde el pasado domingo en un país que se ha convertido en punto de paso clave en la ruta migratoria hacia el sur de Europa, en particular para llegar a las costas de Italia. Las salidas desde Túnez se han disparado desde que el presidente, Kais Saied, anunció un endurecimiento de la vigilancia.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) estima que más de 660 migrantes y refugiados han perecido este año en la zona central del Mediterráneo, una cifra conservadora habida cuenta de que puede haber decenas de personas que desaparecen en el mar sin dejar rastro.
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