La ultraderecha de Suecia quiere acabar con la imagen del país como “paraíso migratorio”. [EFE-EPA]
Estocolmo (Euractiv) / (EuroEFE).- Suecia pondrá en marcha una campaña de concienciación destinada a disuadir a los inmigrantes de venir al país escandinavo, según han anunciado en rueda de prensa la ministra de Migración, Maria Malmer Stenergard, y el líder de los Demócratas Suecos en el Parlamento, el ultraderechista Henrik Vinge.
En el marco de su política para reducir la inmigración a Suecia, el gobierno, apoyado por el partido de extrema derecha Demócratas Suecos (SD), declaró que el país necesita llevar a cabo campañas informativas de disuasión en el extranjero.
La campaña incluirá comunicación dirigida a redacciones y agencias de noticias extranjeras, así como información a las embajadas extranjeras en Suecia.
«Este gobierno fue elegido, entre otras cosas, con el mandato de crear un cambio de paradigma en la política migratoria. Eso requiere muchos cambios importantes», subrayó Stenergard en la rueda de prensa.
MANO DURA EN MATERIA MIGRATORIA
Tras las elecciones de septiembre pasado, el partido moderado de centro-derecha, los democristianos y el partido liberal formaron un gobierno de coalición apoyado por el partido de extrema derecha SD, que obtuvo un histórico 20%. El partido de extrema derecha quedó fuera del gobierno a cambio de sacar adelante gran parte de su política migratoria de línea dura.
«El gobierno sueco tiene un acuerdo [con la extrema derecha], y tiene que cumplirlo. De lo contrario, los Demócratas Suecos harán caer al gobierno. Son como rehenes», declaró a EURACTIV en diciembre pasado el profesor Tobias Hübinette, de la Universidad de Karlstad.
Según Stenergard, más y mejor información podrían evitar que llegaran a Suecia personas sin protección y reducir el sufrimiento que padecen los inmigrantes.
«Hoy en día, dos tercios de los que vienen a Europa no tienen motivos para recibir protección. Ponen sus vidas en manos de traficantes de refugiados y aun así se les permite regresar. Si se les informa de las normas, reducimos el riesgo de sufrimiento de estas personas», añadió por su parte Malmer Stenergard.
SUECIA YA NO ES UN “PARAÍSO MIGRATORIO”
En su opinión, más información ayudará a disipar la idea que tiene el mundo de Suecia como país que ofrece generosas prestaciones.
«La gente suele estar bien informada y hay una razón por la cual 163.000 personas viajaron a través de Europa a la pequeña y fría Suecia en 2015. Fue porque sabían que había (en ese momento) una normativa (migratoria) más generosa», subrayó.
El país, con 10 millones de habitantes, ha visto llegar a su territorio una media de 121.000 inmigrantes cada año desde 2016, con un 20% de la población nacida en el extranjero en 2021, según la Oficina de Estadística.
Editado por F.Heller
Fuente: euroefe.euractiv