Susana Campo. Pie de foto: Un grupo de personas pasa la noche en un campo de refugiados (UNHCR/M. Henley)
Sin agua, sin comida, rodeados de barro, como animales. Así sobreviven hoy más de un millar de personas heladas que esperaban poder entrar en Croacia en la mañana del martes. O se abren corredores humanitarios o condenaremos a miles de refugiados, entre ellos cientos de niños a morir en las fronteras.
Son capaces de atravesar mares en lanchas neumáticas, sortear vallas y muros fronterizos, cruzar ríos y altas montañas en su camino hacia Europa, pero los refugiados se enfrentan ahora a un poderoso elemento que no podrán evadir y que amenaza sus vidas: el inicio del duro invierno europeo, que supone bajas temperaturas, lluvias, heladas y nieve. Desamparados en las fronteras de Europa, su suerte depende de las decisión de los gobiernos europeos de abrir y cerrar pasos. El cierre definitivo de la frontera húngara y la decisión de Eslovenia de no aceptar más de 2.500 migrantes por día es la causa del embudo en las frontera serbiocroata.
En la frontera entre Serbia y Croacia, en el puesto fronterizo de Berkasovo/Bapska, alrededor de 10.000 personas estuvieron ayer varadas durante horas hasta que las autoridades croatas abrieron el paso. Hoy se desconoce cuántas personas llegarán pero desde ACNUR aseguran que al menos 2.500 personas están en tierra de nadie “No sabemos cuántas personas llegarán al final de día, pero miles, muchos niños, continúa en tierra de nadie. Están en una zona empantanada, llena de barro y agua tras las fuertes lluvias donde apenas hay instalaciones. Ayer nos sobrepasó la situación”, asegura a este medio la portavoz de ACNUR, Melita Sujic.
Llegan con poca ropa o con sus abrigos empapados tras atravesar los Balcanes con lo poco que pueden cargar y muchos de los niños llegan sin zapatos Aunque, no sufren problemas graves de salud, tras permanecer durante horas a la intemperie, sin cobijo, sin calor muchos de ellos sufren problemas sanitarios relacionados con las inclemencias. “Permanecen horas y horas al raso. Sin un lugar en el que cobijarse, sin sanitarios… “, describe Sujic.
Aurelie Ponthieu, asesora Humanitaria de MSF sobre Desplazamiento advierte de que “En Berkasovo estuvimos a punto de vivir ese drama que nos da tanto miedo. Aproximadamente 3.000 personas en situación de extrema vulnerabilidad, fueron abandonados al frío, en tierra de nadie, entre fronteras, sin refugio ni asistencia. Más tarde, esa misma noche, los autobuses reanudaron su marcha y volvieron a transportar a personas hasta Croacia, pero el juego de números que se está realizando en el tablero de ajedrez europeo provocará, sin atisbo de dudas, que este grupo de personas continúe enfrentándose, una y otra vez, a distintas crisis. Hemos visto esta clase de ‘casi-crisis’ en Idomeni, Presevo, Horgos y ahora en Berkasovo/Bapska.
En el puesto fronterizo serbo-croata de Berkasovo, más de un millar de personas heladas siguen esperando para poder entrar en Croacia. Francisca Silva, asesora humanitaria de Médicos Sin Fronteras en Serbia, cuenta a www.lainformacion.com por teléfono que “muchos niños y personas con discapacidades están llegando a la frontera. Llegan muy cansados y débiles tras el largo viaje por los Balcanes y con ropa inadecuada para el frio que azota la región. Sufren problemas estomacales, casos de hipotermia y problemas en la piel” Uno de ellos es Azme Solei, un sirio de 29 años originario de Homs y procedente de un campo de refugiados turco: “Hace frío, no hemos podido dormir. Llegué hace 24 horas, he dormido bajo una tienda”, narró
Para poner fin a las dramáticas escenas en los Balcanes la solución propuesta por algunas agencias humanitarias incluye la apertura de vías seguras para que los refugiados transiten.
La tensión entre los ejecutivos, la causa de las tensiones
Desde el cierre de la frontera húngara, la exasperación entre los ejecutivos esloveno y croata no deja de aumentar. Liubliana reprocha a Zagreb que envíe de forma descoordinada decenas de autobuses y trenes a su frontera.
Las autoridades croatas también se enfrentan a un considerable flujo de migrantes que siguen la ruta de los Balcanes desde Grecia, “donde las llegadas volvieron a aumentar radicalmente”, con unos 8.000 arribos a sus islas en las últimas 24 horas, según una fuente policial.
En varios países europeos, sobre todo Austria, los movimientos populistas están ganando terreno. El último ha sido Suiza, al margen hasta ahora de la crisis migratoria, donde la derecha antiinmigración logró un espectacular ascenso en las elecciones legislativas del domingo.
La UE, enfrentada a esta crisis migratoria excepcional protagonizada principalmente por cientos de miles de sirios, afganos e iraquíes que huyen de los conflictos en sus países, no consigue coordinar su respuesta a este desafío. De los 643.000 refugiados que accedieron a Europa por vía marítima desde inicios de año, más de 500.000 lo hicieron a través de Grecia, según cifras publicadas este martes por la ONU.
El destino final para muchos de los refugiados, Alemania, ilustró el lunes la división que provoca esta cuestión y que debilita al gobierno de Merkel, con la congregación de 20.000 personas en Dresde (este) para celebrar el primer aniversario del movimiento populista Pegida, que lidera el descontento por la llegada de refugiados a Alemania.
Eslovenia da poderes adicionales al Ejército para proteger la frontera de la crisis migratoria
El Parlamento de Eslovenia ha aprobado este miércoles la propuesta del Gobierno para dar al Ejército poderes para ayudar a la Policía a proteger la frontera, en medio de la crisis migratoria en el continente, según ha informado la emisora Radio Slovenia.
Según estas informaciones, un total de 66 parlamentarios han votado a favor de la medida y cinco en contra, después de un debate que se ha extendido durante más de cinco horas.
Así, el Ejército contará con poderes adicionales durante un periodo limitado de tiempo, que no será de más de tres meses pero que podrá ser prolongado posteriormente.
El Gobierno propuso el martes enmendar la Ley de Defensa, que contempla que, bajo determinadas condiciones, el Parlamento puede definir “tareas adicionales” del Ejército, lo que permitiría a las Fuerzas Armadas ayudar a la Policía a controlar y proteger la frontera y mantener el orden.
En su comunicado, recordó que Eslovenia “es el país más pequeño en la ruta migratoria de los Balcanes, y cuenta con capacidades limitadas, tanto en cuanto a la eficiencia del control de fronteras como en la entrega de atención a los inmigrantes”.
“Eslovenia invita a los estados miembro de las instituciones europeas a participar activamente para hacer frente a la carga desproporcionada a la que hace frente nuestro país. Desde la perspectiva de Eslovenia, es una prueba a la solidaridad europea”, remachó.
“El flujo de migrantes de estos tres últimos días sobrepasa nuestras capacidades”, señaló el gobierno del país tras una reunión de urgencia celebrada de madrugada.
“Eslovenia pide a los Estados y las instituciones de la UE que se movilicen activamente para responder a esta carga desproporcionada para nuestro Estado. Se está poniendo a prueba la solidaridad europea”, instó el Ejecutivo.
Este martes se prevé que se presente una ley en el parlamento que permitiría ampliar de manera excepcional los poderes del ejército, actualmente limitados a una asistencia logística.
El primer ministro, Miro Cerar, aseguró que “eso no supone un estado de urgencia”, pero “es ilusorio esperar que un país de dos millones de habitantes pueda detener, gestionar y solucionar lo que países mucho más grandes no han logrado hacer”.
El presidente de la Comisión europea (CE), Jean-Claude Junker, y el presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, recibieron este lunes de tarde al presidente esloveno Borut Pahor. Una portavoz de la CE recordó que Eslovenia obtuvo una ayuda del fondo de urgencia de 4 millones de euros, al igual que otros países particularmente afectados por esta crisis
Fuente: atalayar.